En este libro, Isabel Allende narra a su hija Paula todo lo que ha sucedido con la familia desde el momento en que ella murió. A partir de aquel hecho tan traumático, nos cuenta cómo se desarrolla su vida cotidiana al lado de su familia y cómo, poco a poco, va superando la pérdida tan grande.
Pero, lejos de la nostalgia, del pesimismo, Isabel Allende se muestra a sí misma y nos muestra a su pintoresca familia deteniéndose continuamente en anécdotas e historias divertidas. Toda la familia desfila por la novela sin tapujos, personajes la mar de pintorescos (la "tribu" como ella los llama).
He disfrutado a cada minuto con este libro. Está lleno unas veces de ternura, otras de humor, de compromiso, incluso tiene momentos de magia. En más de una ocasión nos veremos a nosotros mismos y veremos a nuestra propia familia reflejada en estas páginas.
Resumiendo, una historia familiar llena de optimismo, complicidad, en el que la fuerza del amor y de la amistad, el compromiso, la ternura, el humor... son una constante.
No he leído este libro del tirón pero casi, desde el principio me engachó. Se trata de una familia increíble, que vive unas peripecias que a veces parecen de vodevil. Y a la vez uno se identifica en muchas situaciones, porque quién no tiene a alguien "especial" (lo de especial en múltiples sentidos) en su familia.
ResponderEliminarY bueno, si ya has leído algo de Isabel Allende entonces creo que te gustará más todavía. Creo que tiene una forma de escribir inconfundible (en este libro a veces se refleja su antigua profesión de periodista.
No me voy a enrollar más, decir que recomiendo este libro, puede ser un muy buen regalo para estas Navidades
Hola: vaya por delante que no me he leído este libro. Me da la impresión que Isabel esta escribiendo el mismo libro desde hace un montón de años.
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